Cuando los probéis, ya no vais a comprar más los industriales ya que los caseros no contienen aditivos, como el glutamato monosódico, ni grandes contenidos de sal.
Ingredientes:
Todo tipo de verduras que os gusten, sobre todo las que sean mas aromáticas como apio, zanahoria, ajo, pimientos, perejil, puerro, eneldo, cebolla, hinojo…
En el supermercado podéis encontrar bandejas.
Preparación:
Cortar la verdura en trocitos pequeños y cubrir con agua. Dejar cocer unos 40 minutos con la tapadera puesta. Después destapar y dejar cocer hasta que se consuma todo el agua. Triturar bien y dejar enfriar. Meter en moldes de cubitos de hielo y dejar en el congelador toda la noche. Desmoldar y meter los cubitos en bolsitas para congelados. Siempre listos para añadir a comidas, caldos, guisos, arroces…
Yo no les añado sal al hacerlo porque me gusta yo misma añadirle la sal a la comida a mi gusto de esta manera no añadimos demasiada.